Wednesday, February 13, 2008

A-49. La autovía inglesa

Suelo viajar mucho por esta autovía, pero en los últimos 3 días la he recorrido en tres ocasiones desde Sevilla a Ayamonte y otras tres de vuelta y he acabado desesperado.
Como si fuéramos todos ingleses, la gente conduce por el carril izquierdo. Da igual que no haya nadie a quién adelantar, el izquierdo es el preferido por todo el mundo.
Hay varios tipos de conductores "ingleses".
- El despistado: Va por la izquierda sin nadie en la derecha. Nunca mira el retrovisor por lo que salvo que sea de noche y le des una ráfaga ni se entera de que estás detrás. Suele ir bastante despacio y en cuanto te ve se quita, pero ya te ha hecho perder tiempo y algo de paciencia.
- El chulito: Este es el que más coraje me da. Va por la izquierda porque le sale de sus santos c. Suele tener un buen coche y se quita cuando le da la gana. Ya puedes hacerle luces, desesperarte, le da igual. Por supuesto, cuando se quita o consigues adelantarlo por la derecha, te devuelve las ráfagas de luces para demostrarte que es un chulo (por si no te habías dado cuenta).
- El miedoso (o torpe): Va por la izquierda porque unos doscientos metros o más por delante y por la derecha va un camión y no quiere quedarse atrapado. Pero hijo de mi vida, te apartas y vuelves al carril cuando estés cerca y no formas una cola.

Con esta forma de conducir, que parece ser que no está penada (aunque conozco a uno que hace muchos años sufrió una sanción de la Guardia Civil por conducir por la izquierda) lo único que se consigue es atascar las autovías y provocar accidentes porque los que vamos un poco más rápido acabamos desesperándonos y adelantando por la derecha, que para algo es una autovía inglesa.

Monday, February 04, 2008

La excusa del fútbol

Con la excusa del fútbol, en Punta Umbría dieron una paliza a 13 cadetes del Bonares. ¿Quién se cree que detrás de todo esto está la defensa de unos colores?.
Falso, no tiene nada que ver, por mucho que una semana antes ocurriera algo parecido en la provincia de Cádiz.
La violencia se ha apoderado de la juventud y sólo tenemos tres formas de enfrentarnos a ella:
La primera mejorando la educación. Está claro que nuestro sistema educativo ha fracasado. Hace falta una reforma educativa que devuelva la disciplina, el respeto y la obligación de estudiar.
La segunda es aplicando sanciones más duras a los menores y a los mayores también. Está claro que la Ley del Menor también es un fracaso y que nuestro sistema penal es muy débil. Hay que hacer algo ya, pues esto se nos está yendo de las manos. Hace falta una ley más fuerte y más justa, que castigue a quién lo merece, porque es la única forma que hay de proteger a las víctimas. Y tiene que ser pronto, porque la indefensión a la que estamos sometidos las personas "normales" puede llevar a situaciones aún peores.
La tercera y como medida "in extremis" mientras las otras dos que requieren mucho tiempo, llegan a aplicarse es buscar la repudia de todo el mundo hacia estos desalmados. Si, por ejemplo, echaran de todas las competiciones deportivas que haya a todos los equipos de Punta Umbría, como hicieron con los equipos ingleses tras aquella maldita final de Copa de Europa, toda Punta Umbría se echaría a la calle para denunciar y repudiar a estos cobardes. Si lo hacemos en todas partes dónde esto ocurra, entre todos acabaremos con ellos.
Pero claro, qué pasa entonces con los aficionados béticos que quemaron coches e hirieron a aficionados coruñeses el pasado sábado. ¿Dejamos a Sevilla sin competidores en ninguna categoría y deporte?. Quizás la medida pueda llegar a ser desproporcionada en qué casos, pero alguna decisión hay que tomar ya.