Monday, September 06, 2021

Mi prima

 LLevo varios días acordándome mucho de ti.

No es que en todo este año que ha pasado desde que te fuistes no lo haya hecho, porque no lo es, pero quizás estos días me estoy acordando más.

Parece mentira que hace un año casi que nos dejaste. Durante este año no he visto a mi tía, ni tampoco a su marido. Apenas hemos intercambiado mensajes.

Sigo teniendo una espinita clavada. Supongo que para ellos, lo que yo sienta es lo de menos, y lo entiendo.

Mi prima y yo estuvimos muy unidos desde que nacimos. Ella está en todos mis recuerdos de la infancia y también de esos primeros años de adolescente.

Pero cuando nos hicimos mayores, nos distanciamos. 

Mira que hay pocas personas a las que mi mujer no caiga bien, pues yo notaba que ella no la quería. La trataba mal, con cierto desprecio siempre que estábamos juntos, intentando ridicularizarla de alguna forma y yo, lo que hice fue alejarme.

Y entonces cayó enferma pero yo seguí lejos. Ella no me llamó y yo tampoco fui. Y esa distancia, conforme pasa el tiempo, conforme pasan los años cuesta más trabajo vencerla. Cuanto menos te ves, más grande se hace la separación y más cuesta acercarse.

Y entonces, un día, se fue. No me dio tiempo a verla, a despedirme, a hacer las paces de una pelea que quizás solo existió en mi mente.

Y mi otra tía me lo dijo, en esos momentos, en los que las emociones superan a la razón, me dijo que ella me había echado mucho de menos. Solo sabía su versión, que yo me había alejado. Ni siquiera se preguntó por qué o ni siquiera si era verdad o había otra versión.

Esa sensación de alejamiento por mi parte, de abandono a la que había sido una de las personas más importantes de mi vida, flotaba en el ambiente y me hizo sentir muy mal. Como un extraño en ello.

Me quedé sin poder despedirme de ella y llevo un año sin acercarme a su madre, mi madrina, porque me siento vil, porque me siento culpable de haberla abandonado.

Y no sé qué hacer. Porque además sé que puedo estar cometiendo el mismo fallo con mi tía.

Pero no sé cómo hacerlo, no sé cómo encontrarme con ella.

Tengo tantas cosas que decirle. Tengo tantas cosas que explicarle, aunque sé que es para nada, porque ya fui juzgado y sentenciado. Culpable de abandono. Pena, alejamiento.


No comments: